Uno de los mayores logros de la empresa y las organizaciones es saber quiénes son sus clientes. Esta tarea recae principalmente sobre el departamento de Marketing y RRPP o en su defecto nos viene dado por el departamento de Ventas. Conocer a los clientes no es una tarea fácil y requiere experiencia. Además, el modo de conocer a nuestros clientes varía en función del mercado en que estamos, los sectores y los productos o servicios que ofrecemos. Es por ello que tener una buena Base de Datos puede ser de gran utilidad para definir nuestras políticas, o un auténtico rompecabezas.
La Base de Datos
La Base de Datos (BBDD) es ese archivo que quieren todos los departamentos pero que no todos saber interpretar. La podemos encontrar en un «doc» o en un «excel», en los contactos de nuestro gestor de correos electrónicos y los más sofisticados en un CRM, MySQL o Acces. En el mejor de los casos (muchos estudios coinciden) las empresas españolas sólo llegan a tener el 15% de los datos sobre un determinado cliente. Esto es: el nombre, el teléfono, el correo electrónico y poco más.
¿Pero qué es una Base de datos? Es esencialmente un almacén de datos que nos permite definir, manipular y utilizar datos para poder entender los mismos. En su mayor parte las Bases de datos están formadas estructuralmente por Entidades, Vínculos y Relaciones. La mayoría de estos conceptos provienen de la teoría de Bases de datos y se refieren a las relaciones existentes entre los datos. Estos almacenes de datos tienen que cumplir con unas condiciones mínimas para poder hablar de una verdadera Base de datos, y es que en ellos tiene que haber Tablas y Formularios y tienen que permitir informes de visualización para su posterior análisis.
Algunas preguntas que hemos de hacernos antes de plantearnos diseñar una Base de datos son:
- Qué datos deseo almacenar.
- Cómo se han de introducir esos datos (Nos referimos aquí a los formularios).
- Cuáles serán las entidades o formas en las que estarán agrupados esos datos.
- Cuáles son las relaciones y vínculos que tendrán cada una de esas entidades.
- Y lo más importante: cuál es la información que quiero presentar y para qué me servirá.
Dicho esto, ahora «sólo» falta segmentarla y analizar su información. Si no dispones de muchas horas, mejor contratar a un experto…
@IDagoberto